Los físicoculturistas necesitan niveles adecuados de testosterona para desarrollar la musculatura y
realizar entrenamiento de monstruos. La privación del sueño disminuye la
testosterona. Un estudio alemán de la Universidad de Lubeck encontró
que el tiempo de sueño era importante para determinar la regulación
hormonal.
Hombres que tienen problemas para quedarse dormidos son menos propensos a
la supresión de testosterona que aquéllos que se despiertan prematuramente
y no pueden dormirse nuevamente. Tener los músculos del cuello muy
tensos aumenta el riesgo de trastornos del sueño como la apnea
obstructiva.
Malos hábitos de sueño pueden acabar con los resultados que obtengas con el entrenamiento. (Clinical Endocrinology, 77: 749-754, 2012).