
La belleza de este aparato es doble: aísla el grupo muscular muy eficazmente (con una máquina no tenéis que preocuparos por equilibrar la barra) y proporciona un elemento añadido de seguridad.
Para comenzar colocad una banca inclinada debajo de la barra y centrada en el aparato. Tumbaos sobre la banca y agarrad la barra con las manos a una distancia ligeramente superior a la anchura de los hombros. Soltad la barra y bajadla lentamente hasta unos cinco centímetros por encima del pectoral superior.
Arnold pensaba que bajarla más restaba estimulación al pecho y situaba excesiva tensión en la articulación del hombro. Probad a empujar la barra hacia arriba de forma explosiva, mientras os concentráis fuertemente en sentir que son los pectorales los que llevan a cabo la acción. Definitivamente añadir el press inclinado en máquina Smith a vuestra rutina contribuirá positivamente a mejorar la forma y tamaño del pecho.
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